Cuando miras por la ventanilla del coche y ves que el mundo se mueve rápido a tu alrededor, que va a una velocidad que tu cuerpo no es capaz de aguantar. Cuando ves que la vida pasa tan rápido y cuando te das cuenta de que su ritmo es de infarto. Millones de razones se me pasan por la cabeza día a día para decirle a la vida que vaya más despacio, que se pare a contemplar y a disfrutar de cada cosa que pasa, pero no, ella se empeña en desestabilizarme y es... odiosamente inquietante. Inquietante porque me pregunto si es ella la que debe ralentizarse, o yo el que tengo que acelerarme. Me dan ganas de sacar la mano por la ventanilla para simplemente rozar como todo pasa tan rápido, sentir en mi piel la velocidad vital que a lo mejor me falta para seguir al mundo.
Que sea otro el que mire por la ventanilla y que me vean a mi corriendo y saltando a una velocidad de vértigo, porque me gusta vivir despacio, pero a veces ir deprisa es la mejor opción.
"Porque vivir despacio es lo mismo que morir deprisa, creedme" 8jin
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